El anuncio del presidente estadounidense, Donald Trump, sobre la imposición de mayores aranceles a China, Europa y muchos países latinoamericanos, provocó reacciones en todo el mundo.
El Ministerio de Comercio de China reclamó a Estados Unidos «cancelar inmediatamente» los nuevos gravámenes que «ponen en peligro el desarrollo económico mundial». También anunció que tomarán «contramedidas para preservar sus derechos e intereses». Un portavoz diplomático le urgió a resolver las diferencias económicas y comerciales «a través de consultas justas, respetuosas y recíprocas».
El Congreso de Brasil aprobó por unanimidad un proyecto que otorga herramientas al Ejecutivo para responder a las barreras comerciales de Trump. La «ley de reciprocidad económica» fue avalada por la Cámara de Diputados, tras recibir un día antes el visto bueno del Senado.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó en una publicación en la red social X que los nuevos gravámenes estadounidenses pueden ser «un gran error». No obstante, en una segunda publicación, aseguró también que su país -que enfrenta un impuesto aduanero del 10%- puede aprovechar y beneficiarse con esta política de Trump, como el resto de Latinoamérica, produciendo más baratos bienes encarecidos en el mercado estadounidense.
«Duro golpe a la economía mundial»
«Vamos a combatir estos aranceles con contramedidas», advirtió el primer ministro de Canadá, Mark Carney, quien consideró que las tarifas estadounidenses «cambiarán fundamentalmente el sistema de comercio mundial» y «afectarán directamente a millones de canadienses”.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que los aranceles constituyen un «duro golpe a la economía mundial». También declaró que la Unión Europea está «preparada para responder», aunque aseguró que «no es demasiado tarde» para abrir negociaciones con Washington.
El jefe de Gobierno de Alemania, Olaf Scholz, consideró que las decisiones de Trump son «fundamentalmente erróneas» y «constituyen un ataque contra un orden comercial que ha creado prosperidad en todo el mundo». Como otros líderes europeos, aseguró que el bloque responderá «de manera unida, fuerte y apropiada».
El primer ministro de Francia, François Bayrou afirmó que las medidas de Trump son «una catástrofe» tanto para Europa como para Estados Unidos.
Aunque en su caso los aranceles serán del 10%, el primer ministro británico, Keir Starmer, dijo a empresarios del Reino Unido que las medidas tendrán «un impacto económico, tanto a nivel nacional como mundial».
«La introducción por parte de Estados Unidos de aranceles a la UE (Unión Europea) es una medida que considero mala y que no conviene a ninguna parte», reaccionó la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, en un comunicado por redes sociales. Y prometió «trabajar por un acuerdo con Estados Unidos, buscando evitar una guerra comercial que inevitablemente debilitará a Occidente», agregó.
Con información de Agencia DW