El informe estadístico refiere a un grupo familiar de dos adultos y dos menores, propietarios de una vivienda.
El Instituto de Estadísticas y Censos de la ciudad de Buenos Aires (Argentina) publicó las nuevas cifras sobre los estratos sociales, donde se detalla que, para no ser considerada pobre, una familia necesitó en agosto ingresos por 966.228 pesos (unos 988 dólares).
La cifra marca un incremento respecto del mes anterior, cuando se necesitaron 929.845 pesos (cerca de 950 dólares). En comparación a septiembre del año pasado, se requirieron ingresos casi 3,5 veces mayores, ya que en ese mes la canasta básica total —que marca el límite de la pobreza— había sido de 282.453 (lo que equivale a unos 288 dólares a su valor actual).
Para la estadística se considera al grupo familiar compuesto por dos adultos económicamente activos y dos menores de edad, propietarios de una vivienda, por lo que no deben pagar alquiler.
En el extremo inferior de la medición, la línea de indigencia, que implica que no se alcanza a cubrir la canasta básica alimentaria, se ubicó en agosto último en 536.493 pesos (548 dólares), quedando por encima de la de julio de este año, cuando fue de 521.602 pesos y de agosto de 2023, cuando se ubicó en 158.669 (unos 533 y 162 dólares respectivamente).
Por otra parte, para ser considerado como integrante de la clase media, durante el mes pasado fueron necesarios al menos 1.501.818 pesos (aproximadamente 1.535 dólares).
Más de la mitad del país es pobre
De acuerdo con el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA), la pobreza en el país alcanzó en el primer semestre del año al 52 % de la población, mientras que la indigencia llegó al 17,9 %.
Este nivel de pobreza, el más alto desde 2004, se trata de un promedio entre el primer trimestre (55,5 %) y el segundo (49,4 %).
Según el estudio, la pobreza y la indigencia durante el segundo trimestre disminuyeron con respecto al primero “debido a la caída de la inflación junto al aumento en los salarios de empleados formales del sector privado, aunque no fue replicado entre trabajadores del sector público e informales”.
Con información de Agencia RT