Las proyecciones de ONUSIDA indican que en 2050 alrededor de 46 millones de personas vivirán con VIH
“Un séptimo paciente se ha curado del VIH”, anunciaba el portal médico Fierce Biotech, el 18 de julio de 2024. Una esperanza para los 39,9 millones de personas que viven con el virus. La información fue difundida por medios locales e internacionales, los cuales detallaban que había sido gracias a un trasplante de células madre, ya que la persona había sido diagnosticada previamente con leucemia.
Pareciera que hubo un progreso científico/investigativo para encontrar la anhelada cura. Pero, ¿Cómo avanza en realidad la prevención y el tratamiento para personas con VIH/Sida en el mundo? Diario EXPRESO tuvo acceso al reciente informe de ONUSIDA, ‘La urgencia del ahora: El sida frente a una encrucijada’, publicado el 22 de julio de 2024.
Revela que debido a la falta de avances en la prevención, las cifras mundiales de nuevas infecciones por VIH no están disminuyendo con rapidez. ¿Y si el Universo es un proyecto de química? Un astrónomo de Harvard lo sugiereHay dos datos que se destacan: menos personas adquirieron el VIH en 2023 que en cualquier otro momento desde finales de la década de 1980, cuando se inició la pandemia; 30,7 millones de personas recibían tratamiento antirretroviral que salva vidas en 2023, un éxito en la salud pública que ha reducido el número de muertes relacionadas con el sida a su nivel más bajo desde el pico alcanzado en 2004.
Pero continúan falleciendo… La ampliación al acceso a la medicación –gran parte de ella proporcionada de forma gratuita y a través del sector público en algunas regiones–, ha reducido en más de la mitad el número anual de muertes relacionadas con el sida. En 2010 eran 1,3 millones. En 2023 fueron 630.000, entre ellas, 76 000 de niños y niñas de 0 a 14 años.
Es decir, “cada minuto muere una persona por causas relacionadas con el sida”, refiere Winnie Byanyima, directora ejecutiva de ONUSIDA.Frente a este panorama catastrófico, los programas de VIH se han fijado el objetivo de prevención 95-95-95, es decir que el 95 % de las personas que viven con VIH conozcan su estado serológico; que el 95 % de las personas que saben que viven con VIH reciban tratamiento, y que el 95 % de las personas que acceden a la terapia tengan cargas virales suprimidas. Pero los números no dan cuenta.
Cuando las personas acceden a su medicina (pastillas o inyectables), hay enormes beneficios para la salud pública.
Con una carga viral indetectable (se evita la replicación del virus y se disminuye su cantidad en sangre hasta niveles que no pueden ser detectados por análisis convencionales) hay cero riesgo de transmitir el VIH por contacto sexual, igual que aquellos que tienen carga viral suprimida. En 2023, casi tres de cada cuatro personas adultas con el virus tenían una carga viral suprimida.Sin embargo, 9,3 millones de personas no recibieron su tratamiento en 2023.
De ese número, 1,4 millones eran niños y niñas. “La infancia representó el 12 % de todas las muertes relacionadas con el sida”. Sí hay una luz para evitarlo y lograr el objetivo fijado para 2025: reducir las muertes relacionadas con el sida a menos de 250.000.
Eso se consigue con diagnósticos tempranos y suministrando los antirretrovirales.
Sin ello, los pacientes pueden avanzar a la fase de sida. Se estima que unos 12,2 millones de personas alcanzaron esa etapa en 2023.
“Es más común en las personas que han recibido terapia antirretroviral y han interrumpido su tratamiento (…) Esto pone en peligro su salud, aumenta el riesgo de transmisión del VIH y agrava la carga de los sistemas de salud”, agrega.
El informe de ONUSIDA también señala que el progreso es desigual. La respuesta mundial al VIH avanza a dos velocidades. En África subsahariana es rápido, pero lento en el resto del mundo. “El número de personas que contraen el VIH está aumentando en al menos 28 países, que ya tienen epidemias considerables”.
Tres regiones están experimentando este incremento: Europa Oriental y Asia Central, América Latina y Oriente Medio y Norte de África. Se estima que 1,3 millones de personas contrajeron el VIH en 2023.
Lejos de la cifra con la que se comprometieron los líderes mundiales para 2025: reducir los casos anuales a menos de 370.000. Muchos programas de VIH todavía descuidan a las personas de poblaciones clave: hombres y mujeres que se inyectan drogas, los hombres gais y los hombres que tienen sexo con hombres, y las personas trans.
Con información de Expreso