A cuatro días del inicio de los Juegos Paralímpicos de París 2024, la llama fue encendida este sábado 24 de agosto en la ciudad inglesa de Stoke Mandeville, donde surgió la idea de estas competiciones después de la Segunda Guerra Mundial.
La llama fue encendida por dos deportistas paralímpicos británicos, Helene Raynsford y Gregor. La primera fue campeona paralímpica en remo cuando ese deporte se estrenó en Pekín 2008. «Este es el lugar del nacimiento de los Juegos Paralímpicos», señaló.
La historia de los Paralímpicos se remonta a 1948, cuando el neurólogo alemán Ludwig Guttmann organizó pruebas deportivas para excombatientes del conflicto bélico que quedaron parapléjicos o en silla de ruedas, en el hospital de Stoke Mandeville, en el noroeste de Londres.
El evento fue organizado para que coincidiera con los Juegos Olímpicos de Londres de 1948. De esa iniciativa nació el movimiento paralímpico. Los primeros Juegos como tal se organizaron en Roma en 1960, con 400 deportistas de 23 países.
El Comité Paralímpico Internacional (CPI) ha anunciado que en esta edición se superará el récord de participación de atletas femeninas con la participación de 1.983 mujeres, lo que supone un 45% y un paso enorme hacia la igualdad.
Asimismo, estos Juegos tendrán un récord de representación internacional, con la participación de 168 delegaciones, superando la marca anterior de 164 países en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 y Tokio 2020.
La competencia arranca el 28 de agosto
El 28 de agosto París abrirá los Juegos Paralímpicos y se enfrentará a los nuevos desafíos sociales del campeonato.
La capital francesa ha albergado los Juegos Olímpicos en tres ocasiones y ha afrontado numerosos cambios para recibir a aproximadamente 4.400 atletas con discapacidades físicas, intelectuales, visuales y parálisis cerebral de 182 países en sus primeros Juegos Paralímpicos.
Para garantizar mismos derechos y facilidad de acceso en París 2024 se han realizado mejoras en estaciones de metro y tren e incorporado ascensores, rampas y señalización táctil, además de adaptaciones en aceras, parques y edificios públicos con semáforos sonoros y elementos táctiles.
Aunque la mayoría de las sedes son preexistentes, se han adaptado para garantizar la accesibilidad, instalándose además 10.400 módulos de sonido en semáforos para facilitar la movilidad de los 1,7 millones de franceses con discapacidad visual, con planes de añadir otros 2.500 antes de los Juegos.
Con información de AFP y Xinhua