Quito, Las cifras de femicidio en Ecuador siguen siendo altas, con al menos 274 casos en 2024 y 1.980 desde 2014, fecha en que se tipificó el delito en el Código Orgánico Integral Penal del país, de acuerdo con Geraldine Guerra, presidenta de la Fundación Aldea (Asociación Latinoamericana para el Desarrollo Alternativo), una organización no gubernamental.
«Son demasiados casos que están quedando ocultos e invisibilizados», señaló Guerra a la Agencia Sputnik.
De acuerdo con la Fundación Aldea, del total de casos registrados el año pasado, 27 víctimas eran niñas o adolescentes; 79 eran madres; 39 estaban desaparecidas y 11 atravesaban el periodo de gestación.
A ello se suma que 129 femicidios ocurrieron en sistemas criminales, en medio de la ola de violencia que afecta con fuerza al país en los dos últimos años.
«Estamos frente a un nuevo contexto de peligrosidad, donde el crimen organizado también perpetra femicidios con otras características: cuerpos de mujeres usados como botines de guerra, uso de armas de fuego, cuerpos de mujeres, niñas, adolescentes o hijas de líderes de otras bandas usadas para amenazar, usadas como revancha y eso también el Estado debería empezar a registrar», consideró la activista.
Guerra cuestionó las estadísticas del Gobierno respecto a una presunta reducción de las muertes violentas de mujeres por su género y señaló que en muchos casos no se están contabilizando como femicidios.
«Meter todo en un saco con un número grande y luego poner femicidios con el mínimo número, eso es manipular la información desde la manera en como está registrado», precisó.
La información gubernamental, recogida en la plataforma Femicidios EC, señala que el número total de mujeres víctimas de muertes violentas desde agosto 2014 a octubre 2024 es 2.735, sin embargo, solo 789 se identifican como víctimas de femicidio, «lo cual representa el 29 por ciento, y, 1.946 son mujeres fallecidas por otras muertes violentas, que representa el 71 por ciento del total de ese universo».
En tanto, en 2023 se informaron de 321 casos de femicidios, una cifra relativamente inferior al registro de 2024, sin embargo, la activista enfatiza que existirían más casos.
Guerra indicó que el Estado ecuatoriano debe generar mejores condiciones para las familias afectadas por este flagelo y ofrecer garantías de no repetición, acompañamiento a los hijos, a los padres, así como entregar una información veraz y facilitar el acceso a la justicia.
«Hace falta todavía que el Estado concrete las medidas para una reparación integral, para una vida digna y eso es lo que está en deuda», afirmó.
No obstante, señaló como positivo que en 2024 se logró una declaratoria de emergencia nacional por la incidencia de violencia, así como la aprobación de la Ley de Contención, Acompañamiento y Reparación Transformadora e Integral a Hijas, Hijos, Madres, Padres y demás Familiares de Víctimas de Femicidio y otras Muertes Violentas por Razones de Género».
Esta iniciativa establece beneficios con becas y ayudas económicas a los hijos en orfandad psiquiátrica, asesoramiento y apoyo, además de establecer un registro único de las víctimas de violencia; y disponer el cambio de apellido de niños producto de una violación, además de que establece la categorización del femicidio en caso de cualquier muerte violenta de mujeres y niñas al momento del levantamiento de un cadáver por parte de la Fiscalía.
Con información de Agencia Sputnik