El Parlamento ecuatoriano deberá someter a su consideración el Tratado de Libre Comercio (TLC) firmado por el gobierno de Guillermo Lasso (2021-2023) con China, tras la aprobación del informe legislativo que debía ser entregado este jueves 4 de enero y el cual recomienda su entrada en vigor, pese a temores sobre el impacto en la economía nacional.
«Por la protección de los artesanos y la industria local, por generación de empleo y el incremento de exportaciones de Ecuador, he votado a favor del Tratado de Libre Comercio con China», dijo Jonathan Parra, legislador por la bancada de la oficialista alianza Acción Democrática Nacional y presidente de la comisión parlamentaria de Relaciones Internacionales y Movilidad Humana, al informar en su cuenta de la red social X sobre la aprobación del documento favorable al acuerdo.
La moción que recomendó aceptar el acuerdo recibió la aprobación de 6 legisladores de 9, a pocas horas de que venciera el plazo para la presentación del informe este miércoles.
La legisladora Raisa Corral, vicepresidenta de la comisión parlamentaria de Relaciones Internacionales y Movilidad Humana por de la bancada del movimiento Revolución Ciudadana (RC, izquierda), expresó su preocupación porque «el sector productivo de China sí cuenta con el apoyo de su Gobierno, lo que no sucede en el Ecuador».
Su correligionario de la RC, el legislador Ricardo Ulcuango agregó que existe preocupación por parte de varios sectores productivos, que argumentan que «se está negociando con un gigante de la producción».
Una vez definida la fecha para el debate en el plenario legislativo, en la votación se requerirán al menos 70 votos de los 137 integrantes de la Asamblea Nacional para que se dé luz verde al TLC.
El gobierno de Lasso dio a conocer durante el proceso de negociación que este tratado permitirá un acceso preferencial para el 99 por ciento de las exportaciones actuales desde Ecuador hacia el país asiático, como el camarón, banano, rosas y flores, cacao, café, y se abriría pitahaya, piña, mango, arándanos, quinua, alimentos procesados, frutas frescas y en conserva, y que dinamizaría la creación de empleos.
En entrevista con la radio local FM Mundo la víspera, Daniel Legarda, exministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, indicó que 826 productos, como la industria textil, de cerámica, del calzado, plásticos, acero, entre otros, están excluidos del acuerdo comercial, es decir, no hay un tratamiento preferencial ni una reducción de arancel para este tipo de bienes.
Señaló que hasta octubre de 2023, según cifras estimadas, se notaba un crecimiento del intercambio comercial de alrededor del 7 por ciento, menor que el año precedente, de un 15 por ciento, por una afectación en el camarón.
«El comercio bilateral supera ya los 10.500 millones de dólares, en el año 2023 seguramente superará los 11.000 millones de dólares. Las exportaciones en 2022 sumaron alrededor de 5.000 millones de dólares; en 2023 será un poquito más de eso, y (…) se volvió ya China nuestro principal mercado de destino de las exportaciones no petroleras», precisó Legarda.
Añadió que existe un espacio muy grande de crecimiento, con un potencial de crecimiento de las exportaciones no petroleras en ese mercado son de 3.000 millones de dólares adicionales.
Con información de Agencia Sputnik