La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y el colectivo ambientalista Yasunidos expresaron hoy jueves su rechazo a una posible moratoria al cierre del campo petrolero bloque 43-ITT (Ishpingo, Tambococha y Tiputini), en el Parque Nacional Yasuní, reserva de la biósfera en la Amazonia (este).

   La posibilidad de una moratoria al cierre del campo petrolero 43-ITT fue anunciada el pasado 22 de enero por el presidente Daniel Noboa, con el argumento de poder obtener recursos para enfrentar el «conflicto armado interno» que libra el país contra el crimen organizado.

   Noboa argumentó que Ecuador está en una situación de «guerra», por lo que consideró viable la moratoria de al menos un año a la operación del campo petrolero, a pesar de que los ecuatorianos aprobaron su cierre en una consulta popular efectuada el 20 de agosto de 2023.

   El presidente de la Conaie, Leonidas Iza, dijo este jueves en rueda de prensa que dicha moratoria no existe ni en la Constitución ni en las leyes de Ecuador, por lo que los indígenas no aceptarán tal pretensión del presidente.

   Iza recalcó que de por medio existe una votación popular a favor del cierre del bloque petrolero que deben acatar.

   Por su parte, el representante del colectivo ambientalista Yasunidos, Pedro Bermeo, dijo que el mandatario ecuatoriano está obligado a cerrar el yacimiento petrolero.

   Yasunidos fue una de las organizaciones ambientalistas que impulsó la realización de la consulta popular y dejar bajo tierra el petróleo del bloque 43-ITT.

   Bermeo agregó que si el mandatario no respeta la voluntad popular expresada en las urnas, la Corte Constitucional tendrá que destituirlo.

   «Si el presidente Noboa firma algún documento para viabilizar la moratoria por un año y continuar explotando el ITT, entonces la Corte tendrá que destituirlo, y nosotros nos encargaremos de seguir las acciones penales», expresó.

   Anunció, además, que la organización ambientalista presentará una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para que tome acciones al respecto.

   De acuerdo con el resultado de la consulta popular y el dictamen de la Corte Constitucional, el bloque petrolero, considerado como uno de los más productivos del país, debe dejar de operar el 31 de agosto de 2024.

   El yacimiento produce unos 58.000 barriles de petróleo al día, lo que equivale al 11 por ciento de la producción petrolera ecuatoriana, según la empresa estatal Petroecuador.

   Para las autoridades, el cierre del campo petrolero supone un duro golpe a la economía ecuatoriana, ya que el Estado dejaría de percibir 1.200 millones de dólares al año por la venta de ese crudo.

   El petróleo es el principal producto de exportación de Ecuador y sus ventas financian el Presupuesto General del Estado. 

Con información de Agencia Xinhua