Quito, Adolfo Macías, alias Fito, líder de la banda delincuencial Los Choneros, de Ecuador, fue traslado a la cárcel de máxima seguridad conocida como «La Roca», en el suroeste del país, tras ser recapturado el miércoles luego de su evasión de una cárcel en enero de 2024.

«Así fue su llegada a la Base Aérea Simón Bolívar, en Guayaquil. Se traslada en este momento hacia ‘La Roca’, la prisión de máxima seguridad», informó el Ministerio de Defensa en la red social X al compartir un video donde se observa el arribo de Fito en un avión y su abordaje a un vehículo.
Fito bajó las escalerillas del avión vistiendo camiseta y ‘short’, esposado, con las manos en la espalda, sin chaleco antibalas ni casco protector, flanqueado por un número importante de militares vestidos de camuflaje.
Según los primeros informes, tras una operación de inteligencia que se prolongó por 10 horas, Fito fue ubicado en un búnker en la provincia costera de Manabí, en el noroccidente del país, junto a otros cuatro hombres armados con fusil, considerados sus escoltas, igualmente detenidos.
El presidente Daniel Noboa dio a conocer la información a través de su cuenta en la red social X, donde anunció que Macías será extraditado a EEUU.
El delincuente más buscado de Ecuador, de 46 años, cumplía una pena de 34 años, 12 ellos tras las rejas, cuando se evadió de una cárcel en Guayaquil a inicios del año pasado por asesinato, robo, delincuencia organizada y tenencia de armas.
Tras su captura, la embajada estadounidense felicitó al Gobierno ecuatoriano y expresó su apoyo al país «para combatir el crimen transnacional a favor de la seguridad de la región».
Este año, Fito fue acusado ante Tribunal Federal de Brooklyn (EEUU) de varios cargos internacionales por drogas y armas, por los cuales podría cumplir desde 10 años de cárcel hasta cadena perpetua.
Esta semana también se evadió de un penal Rolando G. Q., alias «Fede», líder delincuencial de la banda Los Águilas, por lo cual el Gobierno anunció un millón de dólares de recompensa para quien ofrezca información que permita su detención y otro millón de dólares para los integrantes de la Policía Nacional o de las Fuerzas Armadas que recapturen al ciudadano, «al tratarse de un objetivo militar en el marco del cumplimiento de su deber».
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