Quito, Eufórico y confiado en su reelección en las urnas en 2025, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, arriba este sábado a su primer año de gestión, en un contexto de crisis multidimensional (energética, económica y de inseguridad), que le ha costado una caída en la preferencia electoral de cara a las elecciones generales en febrero próximo.
Noboa se dispone a «darle un paseo» a sus adversarios el 9 de febrero de 2025, según ha declarado en un acto público en días recientes, pero ha pedido que «hagan campañas limpias» a líderes políticos y obreros que apoyaron y participaron en las movilizaciones que tuvieron lugar esta semana contra las políticas de su gobierno.
“Yo lo calificaría como complicado (este primer año), ¿por qué? porque creo que las circunstancias en que cualquier candidato o candidata que hubiese ganado el año anterior las elecciones (2023), pues la tenía muy difícil. El país ya venía con una crisis muy profunda, multidimensional, de seguridad, de violencia, económica”, señaló a la Agencia Sputnik la consultora política Tatiana Larrea.
Al evaluar la gestión de los primeros 12 meses de la actual administración, la analista Larrea, directora de la Asociación Latinoamericana de Consultores Políticos (Alacop-Ecuador), enfatizó que este periodo no solo ha sido complicado para el gobierno, sino también para la ciudadanía.
“Este es un país que está sufriendo muchísimos problemas, que son inéditos para el Ecuador, como por ejemplo el de la violencia, que eso sí mata cada día, literalmente”, puntualizó.
Noboa y su equipo, sin embargo, consideran que existen resultados inimaginables en este corto periodo, como la reducción de los homicidios intencionales en cerca de un 18 por ciento, así como la tasa de femicidios.
Al momento, la crisis energética se vislumbra como el «peor enemigo» de Noboa previo a las elecciones, ya que los apagones de hasta 14 horas diarias le han costado una caída en la preferencia del electorado de unos seis puntos porcentuales, según estimados.
El mandatario, por su parte, ha defendido que su gobierno ha invertido más de 700 millones de dólares en reactivar el parque termoeléctrico y en reparar todo lo que no se hizo desde el año 2020 y anunció que en diciembre se acabarán los cortes de luz.
LOGROS DEL AÑO
La analista Larrea, también directora de investigación del Centro de Investigaciones y Estudios Especializados (CIEES), señaló que los logros en los últimos 12 meses «no son muchos» y más bien el gobierno se ha sumido en una crisis en la que persisten la inseguridad, la violencia y el desempleo.
“Creo que los logros como tal no son muchos. O mejor, no hay. Es poco tiempo de gobierno en un país sumido en una gran crisis, que, en lugar de ir avanzando, parecería como que le caen más males, más pestes, y la situación se va complicando”, consideró.
Apuntó que al llegar al Palacio de Carondelet (sede del Ejecutivo), tras ser electo para cumplir con la etapa restante que le quedaba al mandato de Guillermo Lasso (2021-2023), de apenas un año y medio, el gobierno de Noboa no disponía de mucho tiempo para enfrentar el gran reto de levantar al país del descalabro, a lo cual se le sumaron los cortes prolongados del servicio eléctrico y su consecuente afectación a la economía nacional.
“Son problemas que se van sumando y que considero producto también de las inacciones de los tres últimos gobiernos, desde (Lenin) Moreno (2017-2021) hasta acá. Añadió que también existen problemas nuevos, por lo cual apunta que es difícil decir que ha habido “logros” en esta administración.
El presidente Noboa aseguró en un acto público la semana pasada en la provincia de Esmeraldas (noroeste) que su gobierno está resolviendo el tema de la inseguridad y el país está por muy buen camino.
«Ya hay paz en muchos sectores del Ecuador, ya hay turismo, ya hay reactivación económica, ya la gente puede salir a las calles», enfatizó.
Noboa también dijo que sus antecesores le dejaron «hecha la casita» (con problemas), que su administración ha tenido que afrontar, como ha sido la situación del parque termoeléctrico y su falta de mantenimiento, a lo cual se añade el estiaje o bajo caudal de las fuentes (debido a la sequía) que ha complicado el panorama porque la generación de electricidad se genera en las hidroeléctricas.
A Noboa se le critica en estas circunstancias por haber prometido en su campaña electoral que resolvería la situación en apenas nueve meses, con el impulso del plan de desarrollo y las reparaciones, para lo cual dijo que ya había iniciado conversaciones con el gobierno de Israel, sin embargo, ello no ocurrió.
HITOS NEGATIVOS
Para la consultora política entrevistada, los hitos negativos de la gestión de Noboa que influirán en la decisión de los más de 13 millones de electores en las urnas son actualmente «todos los problemas que afronta la ciudadanía», los cual no será fácil de resolver en apenas unos meses que le restan a su administración.
“El listado son todos los problemas que afronta la ciudadanía, pobreza, desempleo, pérdida de empleos, falta de acceso a educación y salud, inseguridad, violencia narcotráfico, crisis eléctrica y un montón de etcéteras”, sostuvo.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), el desempleo en Ecuador se ubicó en julio de este año en 3,7 por ciento y más de la mitad de los trabajadores siguen en la informalidad.
En tanto, también según el INEC, a junio de 2024 la pobreza a nivel nacional se ubicó en 25,5 por ciento y la pobreza extrema en 10,6 por ciento.
Para Larrea, sin embargo, lo que más está influyendo en el escenario electoral es la desconexión de la clase política y los gobernantes con la ciudadanía.
“Si hacemos una breve revisión de las campañas, las ofertas, los estilos, los mensajes, es difícil encontrar alguna candidatura que en verdad esté conectando con el sentir de la gente. Y esa es una de las cosas que más van a influir en el tablero electoral”, sentenció.
Por otra parte, la inhabilitación de la vicepresidenta electa, Verónica Abad, antagonista del jefe de Estado, Verónica Abad, también incide en la pérdida en la aceptación del jefe de Estado entre quienes lo califican como un presidente «misógino».
La vicemandataria, sancionada a 150 sin funciones y sin derecho a sueldo, la funcionaria, había demandado a Noboa con anterioridad ante el Tribunal Contencioso Electoral por violencia política de género, y ahora ha regresado al país para intentar denunciar la «inconstitucionalidad» de la medida en su contra.
Otro hecho que ha marcado desde el punto de vista negativo al gobierno ecuatoriano fue el ingreso de la fuerza pública a la embajada de México en Quito para arrestar al exvicepresidente Jorge Glas (2013-2018).
Este incidente supuso la ruptura de las relaciones con ese país, la condena de Ecuador en el contexto de la Organización de Estados Americanos (OEA) y el inicio de un proceso de demanda contra Ecuador ante la Corte Penal Internacional de La Haya respecto al cual se esperaría una sanción para este país andino.
Ello traerá consigo, además, una afectación al voto de los ecuatorianos en el exterior, ya que no será posible que participen en las elecciones de febrero, no solo en México, sino también en Venezuela y Nicaragua, lo cual ha sido denunciado por el movimiento de la Revolución Ciudadana (izquierda).
Otra situación que marcó un fiasco para la imagen del mandatario fue la ausencia de sus homólogos en la XXIX Cumbre Iberoamericana en la sureña ciudad ecuatoriana de Cuenca, al ser el único presidente de América en acudir a este evento del cual fue el anfitrión.
REELECCIÓN PROBABLE
La consultora ecuatoriana Larrea considera que, pese a estos elementos desfavorables mencionados, el presidente Noboa, quien se postula a la reelección con su movimiento «ADN» (centro derecha) se mantiene entre los primeros lugares en las preferencias electorales, según las encuestas.
«Las posibilidades de ser reelecto las tiene, habrá que ir viendo cómo se desarrolla este último mes del año y el mes de campaña que siempre son meses complejos”, apuntó.
No obstante a ello, los sondeos comienzan a pasarle factura a su gestión, lo cual ha sido admitido públicamente por el presidente-candidato.
Un estudio de opinión de la firma Comunicaliza divulgado el 15 de noviembre arrojó un empate técnico entre Noboa (27,5 por ciento) y Luisa González (26,7 por ciento), la candidata por la principal fuerza opositora, Revolución Ciudadana.
La diferencia de 0,8 puntos porcentuales cae en el marco de la paridad técnica, considerada en un 1,51 por ciento.
El informe apuntó que Noboa descendió en alrededor de seis puntos, mientras González ganaba casi siete, tomando en consideración los últimos dos meses.
Al mismo tiempo, el sondeo refleja un 19 por ciento de indecisos y un 10,8 dispuesto a votar en blanco o nulo.
Según el análisis de la encuestadora, pese a que le fue denegada la candidatura al tercer aspirante en la intención de voto, el empresario Jan Topic (del partido SUMA, centro derecha), el apoyo electoral de sus partidarios se repartiría a partes iguales entre Noboa y González y no solamente a favor del primero.
Comunicaliza atribuyó el bajón del mandatario en los sondeos de opinión a los cortes de electricidad, que en octubre llegaron hasta las 14 horas diarias y en noviembre llegan a 12 y 8 horas como promedio por jornada.
Sin embargo, Noboa acaba de prometer a los votantes que en diciembre «se acabarán los apagones» y ha iniciado una agenda en territorio presumiblemente en la búsqueda de votos.
Para la analista ecuatoriana, es improbable que uno de los 16 candidatos presidenciales pueda ganar en primera vuelta en Ecuador, por lo cual augura una segunda vuelta en las urnas.
“Los escenarios de ganar en primera vuelta son muy improbables, entonces habrá una segunda vuelta (cuando) creo que va a marcarse otra vez el tema de la polarización, algo que el Ecuador no logra superar, los discursos de odio, el descarte entre políticos y entre ciudadanos también”, adelantó.
La analista consideró que, tal como sucedió en 2023, en las elecciones anticipadas convocadas por Lasso, nuevamente el país andino va tener una elección en la cual la ciudadanía deberá optar no por lo que considere mejor, sino lo que considere menos malo.
“Eso por supuesto no es muy alentador en un país que ya viene con una crisis tan fuerte”, resumió Larrea, máster en Comunicación Política y Gobernanza Estratégica.
Con información de Agencia Sputnik