En entrevista con Ecuavisa, Katheryn Pazos, presidenta del Colegio de Ingenieros Eléctricos del Litoral, alertó sobre la grave crisis energética que enfrenta Ecuador. Recientes apagones, como el que afectó a 11 provincias durante cuatro horas, son una señal del deterioro del sistema eléctrico.
Aunque el gobierno asegura que no habrá más apagones, Pazos considera que esta es una esperanza infundada, ya que las medidas anunciadas, como la llegada de una barcaza generadora, enfrentan serios retrasos y problemas de infraestructura. El déficit energético del país asciende a 1.200 MW, y aunque el gobierno ha contratado nueva generación, Pazos advierte que los proyectos no llegarán a tiempo ni serán suficientes.
Además, Pazos señaló que el sistema de transmisión es tan frágil como el de generación, con una infraestructura incapaz de manejar la nueva potencia que se espera incorporar. La reciente falla en la subestación Molino, conectada a Paute, es prueba de esta vulnerabilidad. La ingeniera criticó la falta de mantenimiento y gestión en el sector eléctrico, con muchas centrales inoperativas y proyectos no ejecutados a tiempo, lo que agrava la situación.
Ante este panorama, Pazos considera que los apagones son casi inevitables en los próximos meses y sugiere que el gobierno debe considerar racionamientos preventivos. También subraya la necesidad de una mayor participación del sector privado en la generación y transmisión de energía, dado que el Estado ha demostrado ineficiencia en su administración.
Finalmente, destacó la importancia de adoptar medidas de ahorro energético tanto en el sector industrial como en los hogares para mitigar el impacto de la crisis a corto plazo.
En contexto:
Coca Codo Sinclair, la mayor central hidroeléctrica de Ecuador, suministra el 30% de la energía que consume el país. A pesar de los desafíos del estiaje y el aumento en la demanda, ha demostrado un rendimiento eficiente, garantizando un aporte crucial al sistema eléctrico nacional.
Confirmado.net
