Estrasburgo, Francia — Julian Assange, fundador de WikiLeaks y símbolo internacional de la libertad de prensa, llegó este martes a la sede del Consejo de Europa para ofrecer su testimonio ante la Comisión de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE, por sus siglas en inglés). El activista australiano, quien reveló información clasificada sobre crímenes de guerra de Estados Unidos en Irak y otros países, permaneció más de cinco años encarcelado en el Reino Unido mientras luchaba contra su extradición a Estados Unidos.

La llegada de Assange a Estrasburgo fue recibida con vítores y aplausos de sus seguidores, quienes se congregaron frente al edificio del Consejo de Europa con pancartas y lemas como «¡La justicia triunfa!», «¡La verdad prevalecerá!» y «¡Viva Assange!». En un gesto de agradecimiento, el periodista se acercó a saludar a los presentes, mientras los medios acreditados intentaban cubrir el evento, aunque la entrada fue restringida por la Asamblea.

El expresidente ecuatoriano Rafael Correa, quien otorgó asilo político a Assange en la embajada de Ecuador en Londres en 2012, también asistió a la sesión para presenciar el testimonio de su exhuésped. Esta será la primera intervención pública de Assange desde su liberación de la prisión británica de Belmarsh en junio pasado, tras años de intensas batallas legales y protestas internacionales que pedían su liberación.

El testimonio de Assange ante la Comisión de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos se produce después de la publicación de un informe de PACE que lo reconoce como “preso político”. La comisión se reunirá en sesión especial en el Palacio de Europa, de las 06:30 a las 08:00 horas GMT, para abordar las circunstancias de su detención y discutir las implicaciones de su caso en materia de derechos humanos.

Contexto
Julian Assange fue arrestado en 2019 en la embajada de Ecuador en Londres, donde se había refugiado desde 2012 para evitar su extradición a Suecia y posteriormente a Estados Unidos. Se le acusa de espionaje por la publicación de miles de documentos confidenciales a través de WikiLeaks, exponiendo operaciones militares y diplomáticas de Estados Unidos.

Su detención y juicio han suscitado controversia y críticas de organizaciones internacionales, quienes ven en su persecución un ataque contra la libertad de prensa. Tras su liberación, Assange ha continuado su lucha por la transparencia gubernamental y los derechos humanos, convirtiéndose en un símbolo de resistencia y libertad informativa.

Confirmado.net / El Boletín

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