Periodistas de 24 países visitan Xinjiang

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Un grupo de periodistas de 24 países visitó del 14 al 22 de julio la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, por invitación de la Oficina de Información del Consejo de Estado de China.

Durante el viaje, los periodistas, procedentes de países como China, Estados Unidos, Rusia, Italia, Japón, Arabia Saudita, Turquía e Irán, interactuaron ampliamente con agricultores, estudiantes, clérigos y trabajadores locales, así como aprendices en centros de educación profesional y de formación.

Los visitantes convinieron en que el gobierno chino ha hecho progresos en el combate y la prevención del terrorismo de acuerdo con la ley, la salvaguardia de la libertad religiosa de sus ciudadanos, la preservación de la cultura tradicional de los grupos étnicos minoritarios y la mejora del nivel de vida del pueblo.

ESFUERZOS ANTITERRORISTAS

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Desde la década de 1990, las «tres fuerzas» del terrorismo, el separatismo y el extremismo tanto en el país como en el extranjero han tramado y organizado miles de actividades terroristas violentas y dañado gravemente la estabilidad, la solidaridad y el progreso de Xinjiang, pisoteando los derechos humanos fundamentales a la vida, la salud, la propiedad y el desarrollo de la gente.

La delegación de los medios de comunicación vio una exposición sobre los principales casos de terrorismo en la región en el Centro Internacional de Convenciones y Exposiciones de Xinjiang.

Edvard Chesnokov, subdirector del departamento de noticias internacionales de Komsomolskaya Pravda, un periódico ruso, dijo que el terrorismo es una amenaza global, y que la lucha contra el terrorismo y la construcción de una sociedad pacífica son los objetivos compartidos de todos los países.

Xinjiang se ha centrado en los últimos años en la prevención del terrorismo atacando la raíz y la fuente de los problemas. Su objetivo es prevenir los ataques terroristas proporcionando una plataforma para las personas que han sido influenciadas por pensamientos extremistas y cometido delitos menores para que puedan transformar su pensamiento, aprender el idioma mandarín, aumentar la conciencia sobre la ley y dominar habilidades profesionales.

No ha habido crímenes terroristas violentos en Xinjiang en los últimos 30 meses, dijeron las autoridades.

«Las medidas preventivas adoptadas por el gobierno chino contra el terrorismo han sido eficaces y han proporcionado un modelo para que otros países aprendan», destacó Obidov Mukhammad Dalimovich, presidente de la sucursal regional de Ferganá de la Unión Creativa de Periodistas de Uzbekistán.

En los centros de educación y formación profesional de la ciudad de Artux y los condados de Shule, Wensu y Moyu, los periodistas preguntaron con gran detalle sobre la vida y la educación de los aprendices.

Los aprendices estudian mandarín y leyes y toman cursos prácticos sobre confección, reparación de automóviles, peluquería, comercio electrónico, electricidad, siembra y agricultura.

En el centro del condado de Shule, los periodistas quedaron impresionados por los amplios edificios, bien equipados alojamientos y actuaciones de danza étnica de los aprendices.

«Esto es una escuela, no un campo de concentración», dijo Paolo Salom, subdirector de la sección internacional del periódico italiano Corriere Della Sera.

CULTURA Y TRADICIÓN, PRESERVADAS

Durante la gira, de nueve días, la delegación visitó diferentes instituciones religiosas, incluido el Instituto Islámico de Xinjiang en la capital regional de Urumqi y la Mezquita Id Kah en Kasgar, y se interesó por la formación del personal religioso y el mantenimiento de los lugares de culto.

Khaled Jihad Abdul-Razzaq Al-Saleh, periodista del periódico Al-Watan de Arabia Saudita, dijo que no vio a nadie en el lugar en cuya libertad religiosa se interfiriera y que los musulmanes de Xinjiang disfrutan de la libertad de practicar su religión.

Hashemi Seyedeh Sepideh Seyed Hashem, reportero de la Agencia de Noticias de los Estudiantes Iraníes, elogió las medidas tomadas por el gobierno chino para proteger la libertad religiosa. «Es bueno ver que todos son libres de elegir sus propias creencias religiosas», dijo.

Los periodistas también visitaron el Conjunto de Arte Muqam de Xinjiang, en Urumqi, el bazar de artesanía de la antigua ciudad de Kasgar y el centro de investigación de bordados kirguises en la prefectura autónoma kirguís de Kizilsu. Entrevistaron a artistas y artesanos locales y presenciaron una serie de actuaciones culturales.

Sakchai Pruedthipak, presidente de la web social tailandesa www.salika.co, dijo que las actuaciones han demostrado los esfuerzos del gobierno chino por proteger las tradiciones y culturas étnicas.

Después de ver un espectáculo de danza en el Gran Teatro de Xinjiang en la ciudad de Changji, el consejero delegado de Embassy News de la India, Syed Jawwad, publicó fotos de la actuación en medios sociales, las cuales obtuvieron más de 300 respuestas de internautas indios en dos horas.

«La obra muestra diferentes tipos de bailes étnicos. Fue mágico y llamativo», dijo Jawwad. «En Xinjiang puedes encontrar muchas culturas diferentes. Recomiendo a todos los amantes de la cultura que la visiten», añadió.

VIDA MEJORADA

Xinjiang es la región de nivel provincial más grande de China en términos de superficie, pero también una de las áreas menos desarrolladas. Los periodistas visitaron el Gran Bazar en Urumqi, la zona de desarrollo económico en Kasgar y algunas fábricas de aldeas en el sur. Quedaron impresionados por el progreso socioeconómico de la región.

«Xinjiang tiene ahora fábricas modernas y una infraestructura mejorada. Los residentes viven en casas bien acondicionadas, trabajan en fábricas y tienen ingresos estables y confianza en el futuro», dijo Dalimovich, quien ha visitado la región varias veces.

Abrar Naseem Wahla, presentador de informativos de la televisión pakistaní, dijo que vio que los gobiernos locales de Xinjiang están intensificando la construcción de infraestructuras como carreteras, hospitales y centros turísticos, y trabajan para brindar más oportunidades laborales a los residentes locales.

La delegación también visitó Kekeya en la prefectura de Aksu, un lugar ubicado en el límite del desierto de Taklamakán. Tristemente conocida en el pasado por sus constantes tormentas de arena, Kekeya ha experimentado una acusada mejora de su entorno natural gracias a un proyecto de reforestación iniciado en 1986 que ha erigido una «pared verde» de aproximadamente 77.000 hectáreas entre el desierto y las ciudades cercanas.

«Me complace ver que el desierto se ha convertido en terrenos verdes gracias a los esfuerzos del gobierno chino y de la gente local. Este entorno ayuda a las personas a vivir mejor», dijo Chesnokov.

Confirmado.net / XINHUA

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