16 soldados enterrados en la puerta de casa al final de la Segunda Guerra Mundial

- Advertisement Article Top Ad -

Jutta Höhn no olvidará con facilidad ese día. La verdad es que su hijo sólo quería construir un estacionamiento frente a la casa, en Klessin, un pueblito a orillas del Oder, cerca de la frontera con Polonia. Pero cuando el joven comenzó a excavar, empezaron a salir, primero, municiones de la Segunda Guerra Mundial y, después, también huesos. Ahora Jutta Höhn se apoya en su cerca y mira hacia un pozo en el que se hallan los restos de ocho soldados. Se distinguen con claridad cráneos, huesos, restos de cascos y botas. «Son muchos”, dice. «¿Quién podría esperar algo así?”.

LEA MÁS DW

Confirmado.net

- Advertisement Article Bottom Ad -